Canales, frecuencias, resintonizaciones, programación... Lo que sucede en la televisión en abierto.
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Un artículo que me ha hecho bastante gracia, por las verdades como puños que dice, referente a los contenidos de la actual oferta de canales de la TDT, su mediocridad, y las constantes "resucitaciones" de series y productos antiguos... muchos de ellos no por buenos, sino por baratos.

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TDT: Un guiño al pasado
Una cucharada de resucitación, dos de nostalgia y tres de series de antaño. Ésta es la actual y barata fórmula de la TDT. Una digitalización que apuesta por recuperar viejas glorias televisivas para rellenar tantas horas de programación.


Será porque la crisis ha reducido cuantiosamente el pastel publicitario a repartir en la tele y no hay dinero para producir, o porque las cadenas guardan su artillería pesada para después del apagón -fenómeno que, por cierto, cada vez se asemeja más a aquel psicótico efecto 2000 -. El caso es que conectarse a la TDT a día de hoy significa volver al pasado. Regresar a aquellos programas, series o telenovelas emitidas en los 80, 90 y principios del nuevo milenio que tanto marcaron nuestras vidas. Basta con zapear por las nuevas y variadas ofertas televisivas para cerciorarse de que la digitalidad ha traído consigo un curioso fenómeno: el de la resucitación.

Clan (de TVE) y Antena.neox son los mejores exponentes en este nuevo arte de resucitar viejas glorias. Si se conecta con el canal juvenil del ente público entre semana a partir de las diez de la noche, uno se encuentra con seis horas consecutivas de Everwood y The OC .

Los ñoños líos amorosos de Ephram Brown y Amy Abbot se entremezclan de forma ligeramente extraña con las malotas peripecias de los ricos y sexys adolescentes de Orange County. Una extensa ensalada de series juveniles que se alarga hasta las cinco de la madrugada, cuando Clan recupera los dibujos animados. El fin de semana, en cambio, en lugar de hormonas, besos y coches de lujo, el ente público apuesta recuperar los primeros capítulos de Cuéntame (cuando los Alcántara aún vivían en el franquismo, Inés se acurrucaba con un inglés y Toni estaba de novio con la hija del ministro). TVE sabe que los jóvenes están de marcha y el maduro público exige algo estatal. Un producto con tufo a orquesta y pandereta.


Los nuevos exponentes en el arte de resucitar viejas glorias

Por su parte, Antena.neox, en su afán por revivir aquellos años en los que su madre (Antena 3) era líder de audiencia, también ha optado por la invocación a sus series de éxito. La Farmacia de guardia de Lourditas, Carlos Larrañaga, Emma Ozores y para adentro Romerales , da paso por las tardes al colegio Azcona de Compañeros (con Quimi, Valle, Sara, Bacterio y Francis Lorenzo -dónde andará- a la cabeza).

En este festivo canal también tienen cabida los míticos bailes y cuerpos semidesnudos de Un paso adelante -o UPA Dance , como dirían Mam o Mo, la hermana de Pe-, los años lozanos de Will Smith en El príncipe de Bel Air , las chapuzas de Manolo y Benito en Manos a la obra , y los entresijos vecinales de Aquí no hay quién viva -un poquito de por favor -. La premiada serie de José Luis Moreno que nació inspirada en la Rúe del Percebe (tira cómica creada por Francisco Ibáñez).

Animados por tan jugoso negocio de cero gastos y aceptables audiencias, otros canales de la TDT también se han unido a esta moda de la nostalgia -para qué invertir en nuevos formatos si no lo hace la competencia-. A Telecinco, que siempre se le ha dado bien eso del culo veo, culo quiero , le faltó tiempo hace unos meses para reconvertir a FDF (Factoría de Ficción) en un escaparate de éxitos de antaño.

Los espectadores más exigentes pueden rememorar, entre otros programas, una de las mejores series de la historia de la televisión estatal: 7vidas . Sole, Gonzalo, Paco, Carlota y Aída -en tiempos en los que todavía se desconocía Esperanza Sur- comparten parrilla televisiva con la familia del reverendo Camden, Siete en el Paraíso . Un pasteloso y pretencioso programa que animó las mañanas veraniegas a miles de chavales durante años.

Telecinco 2, hijo predilecto de Telecinco y hermano del anterior, también acoge viejas y terroríficas glorias televisivas. Viejas por su carácter noventero y terroríficas porque el público cultivado siempre pensó que jamás volverían a emitirse. Ignorando dicho clamor, el canal emite en la actualidad Los vigilantes de la noche , secuela nocturna, policíaca y con ropa de Los vigilantes de la playa . Una producción en la que el inmortal Mitch Bukannan, sin flotador, con americana, y aires de Corrupción en Miami , hace las veces de sheriff californiano.

Por último, también destacan las emisiones de Sony TV. El canal, que pertenece a Veo Televisión -tele que, a su vez, es propiedad de Pedro J. Ramírez-, aún no sabe muy bien por dónde le da el aire. Todo parece indicar que el leit motiv de su existencia es el de convertirse en el contenedor de aquellas series mediocres que nadie, o casi nadie, quiso ver en su momento. Matrimonio con hijos encabeza el ranking de esta recuperación de lo absurdo. Las nuevas aventuras de Flipper -¿alguna vez las hubo viejas?-, protagonizadas por una rejuvenecida Jessica Alba, también tienen su importante hueco en la programación.


La tele de Pedro J. Ramírez, un contenedor de series mediocres

Pero si destaca una resucitación en la tele de Pedro J., ésta es, sin duda, Seaquest . Las aventuras del submarino futurista, que a mitad de los 90 entretuvieron a medio mundo, se reviven por las mañanas en digital con la sensación de: ¿pero cómo me podía gustar a mí esto? Cabe recordar que la serie enganchó a muchas adolescentes por la presencia de Jonathan Brandis y no por su elaborado guión o puesta en escena. Un guapo y rubio protagonista que, por cierto, terminó con su vida a los 27 años sumido en una grave depresión. Dentro de la misma cadena y, haciendo justicia a la verdad, El Guardián , como excepción que confirma la regla, es el único programa de calidad que emite Sony TV.

Tras este breve repaso, y aunque la lógica invite a pensar que las nuevas cadenas estrenarán programas y producciones propias tras el apagón, todo parece indicar que esta apuesta por la reemisión de series de antaño va para largo. V , Verano azul , Cosas de casa , Ally McBeal , Expediente X , Falcon Crest , Alf , Al salir de clase , Nada es para siempre , El equipo A , por citar unas cuantas, aún siguen en el baúl de los recuerdos.


Fuente: Diario - Noticias de Álava

Yo creo que las series televisivas no deberían ser un producto de usar y tirar, lo malo es que lo son. Y, al igual que dice:
Las aventuras del submarino futurista, que a mitad de los 90 entretuvieron a medio mundo, se reviven por las mañanas en digital con la sensación de: ¿pero cómo me podía gustar a mí esto?


dentro de no mucho diremos lo mismo de las series que triunfan ahora.

De hecho, el artículo nombra a mucha serie con crítica que tuvieron éxito en su momento, merecido on, según los casos.

Pues a mi no me parece mal que se resucitan algunas series los 90 o incluso de los 80, mucha gente lleva demandando Album Tv desde hace mucho tiempo.
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A mí me parecería bien si las resucitaran para tratarlas bien, a las series y a la audiencia. Pero teniendo en cuenta que las reponen, solo porque no tienen otra cosa, porque son baratas, y a la mínima no se lo piensan dos veces en cambiar el horario o peor, quitarlas sin previo aviso... pues hombre, muchas veces digo "no, gracias".
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